En estos momentos asistimos a un cambio radical hacía una sociedad de la información y del conocimiento. Es probable que vivamos ahora inconscientemente una situación parecida a la de los inicios de la industrialización en el siglo XIX. En cualquier caso, los modelos de la sociedad tradicional y de la industrial tienden a pasar a la historia y el posindustrialismo se está concretando rápidamente en este nuevo tipo de sociedad donde la creación, transmisión y recepción de información ocupan un lugar predominante.

La institución nueva y más característica de la industrialización es, indudablemente, la empresa y en ella están también surgiendo los poderosos fermentos del ámbito a la posmodernindad. Por este motivo es muy importante hacer un esfuerzo racionalizador sobre la empresa. Todas las Ciencias sociales deben empeñarse en esta tarea, y de manera especial la Sociología, atenta a la interpretación de la realidad y a su evolución inmediata.

Cuando hace algo más de un año nos planteamos un grupo de Profesores de Sociología y de Ciencias Sociales en general la necesidad de hacer un libro de texto sobre el mundo empresarial, que fuera útil tanto para estudiantes como para profesionales, nos pareció que deberían plantearse tres objetivos: 1) enmarcar el mundo empresarial en el contexto de la ciencia y de la investigación social, 2) hacer comprensibles las relaciones de la empresa y su entorno, y 3) ver cómo el cambio social afecta a las organizaciones económicas, Estos tres objetivos constituyen las tres partes del presente libro.

Para abordarlos hemos considerado adecuado catorce temas que nos han de parecer básicos, de cuya redacción se ha responsabilizado un especialista en cada materia. La escasa coincidencia geográfica, ideológica, de ámbitos de formación y de experiencias vitales de los autores nos ha parecido enriquecedora. Hemos procurado unificar criterios formales y didácticos, de manera que el libro incluya un todo coherente y completo. A estos efectos, ha sido muy útil que cada uno de los capítulos haya sido revisado al menos por el coordinador y otro de loa autores.

El resultado obtenido es también producto de un acuerdo de cuidar los aspectos pedagógicos, sin dar muchos conocimientos por supuestos y procurando introducir y conectar los temas de modo general. Se animó a todos, además, a procurar aportar esquemas, resúmenes de lo tratado, ejemplos o casos prácticos que pudieran ayudar a comprender mejor los temas por parte de personas sin una especial formación previa. Estamos por tanto, ante un texto equilibrado y fácil de abordar.

En el capítulo que abre el texto, con el que se inicia la primera parte –titulada Empresa y Ciencias Sociales-, se sitúan las tendencias socioculturales de la sociedad moderna y del mundo del trabajo. Se perfila así el campo conceptual sobre el que la evolución de la teoría de la organización nos plantea el estudio de la empresa, como un sistema abierto caracterizado por una cultura. La doble visión de la empresa como organización compleja y como institución o cristalización de unos determinados roles completa un punto de partida sobre el que es fácil entender la aplicación de la Sociología.

En el Capítulo segundo, el profesor Monzón complementa la visión sociológica de la organización empresarial con una perspectiva psicológica, atenta al factor humanos desde el punto de vista del comportamiento individual. Aquí se hace una especial consideración a temas prácticos como el liderazgo o el estrés en el trabajo. La ampliación de este esquema psicológico, centrándose más en el análisis de la motivación humana en el trabajo realizado, es el capítulo realizado por el profesor Pin Arboledas que se propuso esbozar un modelo de funcionamiento de las personas en el trabajo en el que tiene una gran importancia el aprendizaje.

Se termina esta Primera Parte con el capítulo de la profesora  M.ª Eduvigis Sánchez sobre las posibilidades de las técnicas de investigación aplicadas a la empresa. La distinción entre métodos y técnicas, así como las diversas perspectivas que nos señala –distributivas, estructurales y dialécticas- para estudiar la sociedad, nos manifiesta también la diferente sensibilidad posible ante los hechos sociales.

En la Segunda Parte del libro, centrada en la influencia del entorno, se abordan problemas nuevos y con poca tradición en la Sociología. Así, la profesora Gómez Cabranes trata un tema teórico de gran actualidad, el de la cultura de la empresa, cuya importancia ha venido tanto por la convergencia teórica de la que es producto, como por la facilidad con que desde su perspectiva es posible abordar estudios comparativos. Las posibilidades en este esquema teórico para estudiar unitariamente la adaptación al entorno y la cohesión interna nos muestra una gran ventaja práctica. Conectado con este capítulo está el sexto, en el que el profesor Jesús de Garay estudia los códigos éticos de las empresas desde un planteamiento abierto en el que perfila y analiza los valores emergentes, los discutidos y los rechazados, para terminar con una propuesta amplia del ideal ético de la empresa en la actualidad.

En el Capítulo siete, Pérez Adán, mantiene la tensión sobre los nuevos problemas que afectan al mundo empresarial, con la referencia al medio ambiente y a la Ecología. Indudablemente estamos ante un tema de moda, con poca bibliografía disponible, donde el solo planteamiento de la cuestión, la exposición de los dilemas teóricos existentes y las posibles opciones a seguir suponen un paso firme en la consolidación de un campo de estudio que va a ser de importancia creciente.

El capítulo sobre el sexismo en el trabajo, como una manifestación de los prejuicios laborales de hoy en día, de Menchu Ajamil, es también un tratamiento de un tema candente y de gran actualidad. Las continuas referencias a la situación española permiten ver con claridad esta faceta del mundo del trabajo, que con frecuencia permanece oculta y es indispensable conocer y racionalizar. También el capítulo noveno, sobre el Mercado Laboral, del profesor Juan Ortín de la Universidad de Murcia, está muy centrado en la situación española. Sus análisis se sitúan en un terreno movedizo, a causa del carácter cambiante de la población, especialmente acentuado en la población laboral; en este contexto, se hace un corte trasversal en profundidad, en el que se definen las variables necesarias para todo el análisis. En las dos facetas a que nos referimos, tan solo el conocimiento adecuado del momento presente de la realidad social permitirá entender su evolución.

En el siguiente capítulo, el profesor Gómez-Llera aborda el estudio de la adaptación de las organizaciones a su entorno desde la perspectiva de la mutua utilidad en un sistema de transacciones. Se trata de ver esta situación desde el punto de vista de la estrategia, como toma posición dinámica ante el entorno. Hay un deseo de trascender la aportación de las organizaciones y tener en cuenta a las personas que la constituyen.

En la última parte del libro se abordan diferentes temas donde está presente la importancia del cambio social para las empresas. Primeramente, la profesora Isabel de la Torre plantea el marco social en el que se mueven las relaciones laborales, con unos actores o agentes (el Estado, la patronal y los sindicatos) crecientemente institucionalizados y cuya influencia va más allá de las posibilidades de la negociación colectiva. La elaboración práctica de sus propuestas con la referencia a la situación española y europea nos muestra las posibilidades de unos esquemas teóricos firmemente asentados, Complementaria a este tratamiento es el del profesor Antonio Martín, centrado en la negociación colectiva y en su sentido participativo. En efecto, las propuestas de búsqueda de la democracia industrial en España, más que a través de la participación en el capital (por la vía de las cooperativas, o mediante la formación de fondos colectivos), se ha ido tímidamente perfilando por medio de la intervención de las partes implicadas en los convenios colectivos. Por ellos tiene especial interés su tratamiento minucioso.

En el capítulo del profesor Morales Gutiérrez se establece un diagnóstico del conflicto organizativo y se plantean las posibles soluciones. Su importancia proviene de lo inevitable que es la realidad del conflicto y de su omnipresencia en la sociedad, en especial cuando hay intereses económicos. De esta manera, cualquier luz para comprender el problema no puede dejar de buscarse con ahínco, especialmente en las sociedades complejas en que nos movemos. Se agradece, además, el carácter positivo, “constructivo”, de las propuestas, que unas veces se hacen de forma clara y otras veces quedan implícitas.

Terminamos en libro con una interesante aportación de la profesora Violante Martínez Quintana, de la Universidad Nacional de Educación a Distancia, sobre el absentismo laboral. Aunque el tema es puntual y pueda permanecer menos, es obvio que su importancia es creciente, no sólo por las cifras significativas de trabajo perdido y sus consecuencias, que van más allá de los aspectos puramente económicos, sino por darnos un síntoma claro de la evolución –positiva o negativa- de las sociedades industriales. Un trabajo completo y preciso del fenómeno, desde su origen y los aspectos teóricos relevantes hasta los aspectos clave de medición y control, nos permite abordar una comprensión que es necesaria.

Nos encontramos, por tanto, ante un manual de Sociología centrado en la empresa, que ha intentado –mediante el tratamiento en profundidad de catorce grandes temas que afectan al mundo de trabajo en nuestra sociedad- dar a conocer la realidad de la empresa y las posibilidades de su estudio. Se trata de una racionalización de diferentes aspectos relevantes del mundo empresarial, pero siempre con una inclinación práctica. Por eso estamos ante una Sociología para el Empresa.

Madrid, 15 de mayo de 1994.

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